- Este premio pretende mejorar y favorecer el conocimiento del municipio, incentivar la difusión de la cultura y ampliar la historiografía local
- El certamen se recuperó en 2020 tras 12 años y dio como resultado un importante estudio sobre el yacimiento arqueológico de la Cova de les Bruixes
El Ayuntamiento del Poble Nou de Benitatxell vuelve a lanzar una nueva edición del prestigioso Premio de Investigación Puig Llorença, que está dotado con una beca de 3.000 euros. Este premio, ahora bianual, pretende mejorar y favorecer el conocimiento del municipio, incentivar la difusión de la cultura y ampliar la historiografía local.
El certamen admitirá trabajos de científicos de los ámbitos de las ciencias sociales, ambientales y humanas (historia, geografía, antropología, arqueología, patrimonio, etnografía, filología…), con una especial sensibilidad por los estudios de género. El centro de las investigaciones tendrá que ser El Poble Nou de Benitatxell o la comarca, a pesar de que en el segundo caso tendrán que guardar una relación temática y documental directa con el municipio.
Podrán participar investigadores e investigadoras de manera individual o colectiva. El premio, que elegirá un jurado experto formado por cinco personas de prestigio reconocido relacionadas con el mundo de la cultura y la investigación, se otorgará al mejor proyecto inédito de investigación.
Las solicitudes se pueden presentar hasta el 30 de septiembre de 2022 en el registro general del Ayuntamiento, en formato preferentemente digital. El consistorio se reserva el derecho de publicar el trabajo de investigación durante el periodo máximo de dos años. Se pueden consultar las bases del concurso en la web municipal.
La beca de investigación Puig Llorença goza de un considerable prestigio y es un referente cultural que incluso traspasa las fronteras de la Marina Alta. Además, ha dado lugar a interesantes estudios sobre arquitectura o toponimia. El año 2008, con la desaparición de la Asociación Cultural Puig Llorença, dejó de convocarse, pero en 2020, con la intención de rescatar la memoria de la localidad, el equipo de gobierno lo volvió a poner en marcha después de 12 años.
De esta última convocatoria nació el interesante trabajo de investigación sobre el yacimiento arqueológico de la Cova de les Bruixes, realizado por el arqueólogo Miquel Sánchez Signes.